Ruido político actual
y nuestra propuesta pragmática
Los políticos hoy solo producen ruido; tanto que ha llegado un momento en el que creemos que han traspasado el límite del ridículo porque es ya más del que ellos mismos y el pueblo pueden absorber.
Provocan ruido pero tienen la conciencia sorda. El ruido que producen con las palabras gastadas de siempre es enceguecedor. Hay que despertar. Lo único que uno debe hacer es taparse los oídos y pensar. Pensar en si están haciendo su trabajo. En si están legislando y haciendo el bien para los ciudadanos. Ellos también son ciudadanos y su poder y jurisdicción deberían ser recíprocos para el pueblo. En TR no lo sentimos así; solo están ahí por y para el poder, el ego, el reconocimiento propio.
-Pragmatismo:
¿Darías una clase de mecánica de tractores a un escritor, a un agricultor, un pescadero, una jueza, una policía y a un maestro? No, solo al agricultor que usa esa máquina; pues eso es lo que ocurre con las ideologías preconcebidas en nuestro país: aplican una norma desde el Gobierno central a todas las regiones y estas tienen necesidades distintas; es por ello que en TR hablamos de utilizar la estadística, el estudio, el saber, y empujar a cada región y sector según sus necesidades; de tener un Gobierno aséptico que una al pueblo, y no de uno cuyos políticos (que antaño significaba ciudadanos) impongan sus ideas preestablecidas, intereses, para encasillar, dividir al pueblo y sacar con ello un rédito electoral y no un beneficio para la sociedad civil, no una mejora común, desuniendo, deshaciendo la hermandad.
¿Cómo lo haremos? Sigue leyendo. Te sorprenderás con nuestro programa y cercanía.
Lo que te adelantamos, es que nosotros no vamos a abandonar la máxima con la que se estableció la política moderna, la Suprema lex (salus populi suprema lex): EL BIENESTAR PÚBLICO DEBE ESTAR POR ENCIMA DE CUALQUIER CONSIDERACIÓN A LA HORA DE TOMAR DECISIONES GUBERNAMENTALES.