Nosotros:

Aquí tocaría el auto-bombo… Pues sentimos decepcionarte. Nuestro pragmatismo nos hace creer en ser uno más —de ahí la igualdad y la proximidad—, y en encontrar resultados a cualquier tipo de planteamiento que se nos presente, no en promocionarnos. 

Esto se consigue trabajando unos atributos que serán inalcanzables sin el conocimiento, pues el dominio, línea por línea, será mayor a mayor sea el conocimiento del hombre y su capacidad para discernirlo.

Es aquí donde nace el hijo que arbitrará sobre los demás atributos. Nacido del conocimiento, el discernimiento medirá la intensidad con la que aplicar los demás.

Perennes, estos son, y ellos nos rigen:
-Discernimiento.
-Tenacidad; integridad; vergüenza; estudio; disciplina; autoestima; austeridad; discreción; pragmatismo y civilidad.

De acontecer (discernimiento, de nuevo):
-Finitud (sin aceptarla, no seremos felices. En materia política, no entenderemos nuestros límites y no conocerlos será la puerta de entrada para la codicia, tanto moral como… corrupción a todos los niveles personales; política, por ende).
-Infinitud (debemos ser infinitos en la defensa de lo nuestro, que, de nuevo, en materia política, significará la defensa de nuestros conciudadanos y sus intereses; hasta la última de las consecuencias).